En las últimas semanas estamos recibiendo muchas consultas para adelantar donaciones y evitar así el posible impacto de una subida fiscal en comunidades con una menor presión fiscal autonómica, como es Madrid.
Como bien sabemos, el Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones es un impuesto cedido a las comunidades autónomas, que lo recaudan y albergan capacidad normativa sobre el mismo
El caso es que el Gobierno quiere armonizar la tributación autonómica en la futura reforma de la financiación y, además, quieren que sea su primera medida. La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, recordó hace unas semanas antes de las elecciones su intención de «armonizar» impuestos como el de Sucesiones y Patrimonio, lo que elevaría los tributos en regiones como Madrid.
Esto ha hecho que los ciudadanos estudien anticiparse a una hipotética armonización impositiva, beneficiándose de las bonificaciones que ahora existen en comunidades como Madrid, antes que haya un suelo de tributación. De esta forma sería beneficioso para el contribuyente.
Aunque es difícil que la reforma de la financiación autonómica se apruebe pronto, grandes fortunas pero también particulares con una riqueza más modesta han comenzado a preguntar cómo anticipar operaciones para evitar una futura subida de Donaciones.
Según ilustra el Panorama de la Fiscalidad Autonómica del Reaf, en un ejemplo en el que un soltero recibe una donación de su padre de 800.000 euros, Castilla y León y Extremadura serían las comunidades donde más se paga, con 208.159 euros en 2019 –aunque la primera está tramitando una bonificación del 99% entre familiares directos–. En el otro extremo, un cántabro en esta situación no pagaría un euro, un canario tributaría 200 y un madrileño, 2.000 euros.
Es cierto que será difícil poner de acuerdo a comunidades con modelos fiscales tan diferentes pero ante la posibilidad de que la propuesta del Gobierno salga adelante… el dinero se adelanta a todo.
Fuentes:
www.abc.es/economia